Paris Fashion Week cumplió con su calendario convencional tal como lo había anticipado, la semana de la moda parisina se extendió desde el 28 de septiembre al 6 de octubre. En un mundo que aún continúa conmocionado, la moda define la contemporaneidad, son momentos que nos invitan a la reflexión y a la conexión.
El público es otro y exige a la industria una mirada distinta. Somos testigos de un futuro anticipado, los tiempos se aceleraron y la reinvención ha de ser inmediata.
El objetivo pareciera ser “resistir” y en el medio la creatividad, la singularidad de los diseñadores salen a escena en distintos formatos. Desde presentaciones en línea hasta desfiles con público en presencia física, hemos podido recorrer distintos espectáculos.
Sin embargo, se pudo observar que la tendencia actual pareciera centrarse en la fusión entre elementos tradicionales y digitales, una forma híbrida que habría llegado para quedarse.
Además del despliegue visto en los desfiles de las principales casas, tales como Christian Dior, Balmain, Givenchy, Hermes, Paco Rabanne, Chanel, Louis Vuitton, Yohji Yamamoto… presentando sus colecciones PRÊT-À-PORTER primavera-verano 2021, la semana de la moda parisina presenta una grilla de eventos que se desarrollan en simultáneo en diferentes puntos emblemáticos de la ciudad.
Con una misma filosofía de presentación basada en formatos que alterna lo virtual y lo presencial se puede establecer un recorrido por exposiciones, como por ejemplo “Manifeste de moda “una retrospectiva sobre la obra de Gabrielle Chanel, llevada a cabo en el Palais Galliera, o disfrutar de la exposición virtual “La mode à versailles“ desde el Palacio de Versalles.
Casas como Hèrmes, Louis Vuitton y Chaumet presentan sus colecciones de alta Joyería, con escaso numero de invitados, apelando a la presentación de los productos apoyados por soporte audiovisual, la intención sigue siendo el contacto estrecho y directo con los materiales y la confección de cada una de las piezas.
El Museo de Arte Moderno expone “Sarah Luna” un recorrido sobre el trabajo de la fotógrafa de moda Sarah Moon. El Palacio de Tokyo, conocido como el refugio de artistas y creadores, desde 2017 desarrolla un programa de moda que trabaja con jóvenes diseñadores emergentes a través de una serie de eventos híbridos.
En el emblemático Hotel Vivier se realiza el lanzamiento digital de Roger Vivier SS21, sus presentaciones solían ser el lugar perfecto de encuentro para personajes de la industria, editores y periodistas. Hoy apelando al juego, lo virtual y lo interactivo y recibiendo de manera individual a sus invitados. A modo de showrooms la sala de exposiciones Dover Street Market París presenta a jóvenes diseñadores y etiquetas, estableciendo un contacto directo con el producto, respetando los protocolos de seguridad pertinentes y recibiendo a un número reducido de personas.
Presentaciones, proyecciones, entrevistas, lanzamientos y encuentros globales completan la agenda de una de las semanas de mayor impacto en la industria de la moda. La magia no solo se desarrolla sobre las pasarelas, sino que trasciende los limites de las mismas. Los formatos han de adaptarse y nos invitan a repensar nuevas formas de trabajo, presentaciones y consumo.